“Heme aquí” o “Aquí estoy” son dos frases con dos palabras que aparentemente no tienen mucha trascendencia.
Pero cuando el llamado es de Dios, como le ocurrió a Samuel, Moisés o Isaías, por poner un ejemplo, y debemos responder, ¿podríamos decirle: “Estoy dispuesto a escucharte, estoy dispuesto a seguirte, estoy dispuesto a trabajar, estoy dispuesto a obedecerte, estoy dispuesto a ir a donde me envíes”?
La respuesta ideal sería: “Heme aquí, aquí estoy Señor. Yo voy, envíame a mí”.
Si Jesús está contigo 24 horas al día durante 7 días a la semana, en otras palabras, siempre, déjame preguntarte algo: ¿estás tú ese mismo tiempo con Él, buscándole, siguiéndole, amándole y obedeciéndole? ¿Estás entonces dispuesto a escuchar? Pero más importante aún, ¿estás dispuesto a ir a donde el te ordene ir?
¿Estás dispuesto a ser un buen discípulo, un verdadero discípulo de Jesús?
El reto no es opcional si en realidad eres un hijo de Dios.
Pero, ¿qué hacer? ¿Cómo estar seguro? Te invito a que escuches la serie, “Verdaderos Discípulos“, y revises tu vida a la luz de las Escrituras; ¿eres verdaderamente Su discípulo? (Haz clic aquí para ir a la página de la serie).
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Es nuestra oración que nuestro Dios utilice este breve llamado y los estudios recomendados para bendecirte a ti, a tu familia y a todo el pueblo de habla hispana sobre el cual Su nombre es invocado.
—David Franco
Ministerios Jesús 24×7